Bueno, bonito y barato.Hacer una odontología que cumpla esa popular frase de las tres B no existe. Hacer una odontología seria, eficiente, eficaz y de excelentes resultados estéticos y funcionales tiene factores que impiden que el «barato» se cumpla.
Un ejemplo claro de esto son los implantes dentales, ya que para seguir usando este ejemplo de tratamiento, involucra factores como:
[Recupere piezas dentales perdidas con implantes dentales]
– Depositar un implante dental (tornillo de titanio) implica que sea hecho por un profesional calificado. Que sus cursos, entrenamientos, especialidad, etc hagan que el implante dental sea depositado de una forma adecuada, sin comprometer ni invadir estructuras internas y que sea posible una adecuada rehabilitación (prótesis). El éxito empieza desde el diagnostico y evaluación clínica pasando por la correcta lectura de los exámenes auxiliares.
– Que el implante dental sea de una marca conocida y reconocida. Los implantes son tornillos de titanio que son un medio y no un fin, ya que el fin es poder rehabilitarlos (confeccionar una corona, hacer una prótesis removible, etc). La exactitud en el engranaje de las partes de la protésica con el implante tiene que ser excelente para poder lograr buenos resultados estéticos y sobre todo funcionales.
– En prótesis (rehabilitación oral), el éxito no solo depende del profesional odontólogo, si no que es un trabajo en equipo con el Técnico Dental, quién es el profesional calificado que al usar correctamente materiales de casas dentales reconocidas junto a una parte clínica adecuada harán sinergía para poder obtener un excelente resultado. El color, el arte, la exactitud y la belleza del trabajo depende del Técnico Dental y de ese trabajo en equipo .
Por razones como por la arriba expuestas la triple B no existe en odontología, lo que si existe es una odontología de excelentes resultados estéticos y funcionales que tienen unos costos que van en sintonía con ese resultado.
Odontología eficiente, efectiva, eficaz y predecible.