Los niños, más aún a temprana edad son muy inquietos. Inquietos porque están en el pleno descubrir de todo, y todo les llama la atención,asimismo por el aumento de actividades de los niños fuera de casa.
Quieren coger las cosas, tocar las cosas, correr, caminar, sonreír, jugar y ser felices. En esta aventura que es la vida y que recién empiezan a recorrer su camino, pueden pasar pequeños accidentes que afecten su dentición.
El más común de estos accidentes, son las caídas o golpes que pueden suceder en los dientes, principalmente anteriores superiores.
Un niño que sufre un golpe contra estos dientes debe ser inmediatamente evaluado por el odontopediatra para determinar que hacer y determinar lo más rápido posible si hay una sub – luxación, una luxación o una fractura, si hay movilidad y si hay dolor. Junto a la evaluación clínica va el examen radiográfico.
Si se confirma a través de la evaluación clínica y la radiografía que no hay fractura, lo que continua es que si ha habido algún tipo de movimiento en la posición de la pieza dental, chequear que no interfiera en la oclusión.Asimismo se indica dieta blanda por una semana y analgésico y anti-inflamatorio condicional al dolor.
Si el escenario es distinto y hay fractura,lo que corresponde es la exodoncia de la pieza dental.